Qué sitios hay que ver cerca de Potes
Liébana es un lugar privilegiado en todos los aspectos posibles. Para empezar, se trata de un entorno natural sin comparación en España y en Europa, puesto que constituye un ecosistema único y con un microclima propio.
Un caso muy parecido al que podamos tener en el Bierzo, pero lógicamente con una personalidad diferente. De hecho aquí puedes encontrar un bosque de alcornoques por el que discurre una de las muchas rutas para senderistas: El Alcornocal de Tolibes.
Esta especie de árbol es más propia de climas mediterráneos pero el clima de Potes y sus alrededores es más cálido que el del resto de la provincia.
Veamos algunos motivos por los que es tan distinto Liébana y qué sitios hay que ver cerca de Potes, la capital de la comarca.
El castillo de Mogrovejo, en pleno valle de Liébana
Dice el refrán que «ni amigo lebaniego ni río por lindero», pero la verdad es que la gente local es muy simpática. Muy abierta con los turistas y peregrinos, no sólo del Camino de Santiago, sino de un itinerario propio que pasa por estas montañas y que es el Camino Lebaniego. Una ruta que mezcla lo espiritual, cultural y natural en un paraje muy indicado para todo ello. Y es que aquí tenemos de todo. Por ejemplo, si seguimos esta ruta pasaremos por castillos como la torre de Estrada, a la entrada del valle, o el castillo de Mogrovejo, en pleno valle de Liébana.
El origen del camino lebaniego y el monasterio de Santo Toribio de Liébana
Toda esta zona fue muy importante al principio de la Reconquista, cuando los cristianos que huían de Al Ándalus se recogieron en estas montañas. Por eso acabaron aquí muchas reliquias, como el trozo más grande de la cruz de Cristo, que es el origen del Camino Lebaniego y el Monasterio de Santo Toribio de Liébana. También era de aquí un monje llamado Beato de Liébana que escribió los famosos comentarios del Apocalipsis, cuyas ilustraciones son muy conocidas.
Ver osos pardos en Liébana
La población de osos pardos en Liébana es la más estable de Cantabria, precisamente por situarse el valle en una conjunción entre los únicos territorios ibéricos donde viven estos grandes omnívoros.
Se trata de animales que pueden ser peligrosos para el hombre, sobre todo, cuando sus crías están presentes. Para no cruzarnos con ellos lo mejor es no avanzar por los caminos en silencio y en solitario, pues de esta manera podrían no detectarnos y llegar a cruzarse con nosotros sin querer. Siempre intentan evitar al ser humano.
Si estás dispuesto a ver osos en su medio natural y de forma segura puedes contratar alguna de nuestros tours para ver animales en Cantabria y en las provincias cercanas.
Lugares para ver en Liébana
Son muchos los lugares para ver en Liébana y sorprendernos con la belleza peculiar del paisaje, la fauna y la flora, así como con la particular arquitectura y gastronomía de la zona, que nos recuerda mucho a las vecinas Asturias, León o la Montaña Palentina. El teleférico de Fuente Dé es impresionante, así como nos van a encantar también la iglesia medieval de Lebeña, la de Santa María de Piasca o las poblaciones rurales auténticas de Bejes o Piedrasluengas.
Antes de llegar al Valle podemos recrearnos en cosas curiosas, como el angosto desfiladero de La Hermida, principal acceso a toda la comarca de Liébana, o el acceso por el Val de San Vicente y Lamasón. En estas paradas previas encontraremos perlas poco conocidas por el gran público, pero que todo buen viajero debería saber apreciar.
En el Castillo Real de San Vicente de la Barquera puedes ver un cañón de la época de los piratas
San Vicente de la Barquera es una villa muy reconocida por sus características para el turismo. Además de disponer de un bonito paseo marítimo y una gran playa, podrás encontrar una gran oferta gastronómica con un buen número de restaurantes.
No le falta de nada a esta villa marinera cuyos pescadores medievales exploraron rutas nunca antes navegadas, desde su puerto de origen hasta Canarias y llegando hasta la lejana Irlanda.
Hay que tener en cuenta, también, que estás villas pesqueras eran a un mismo tiempo bases militares medievales muy potentes. Expertos marinos que constituían la Marina de Castilla que se enfrentó durante siglos Inglaterra y otras naciones del norte, así como contra Al Ándalus. Y también eran muy conocidos por la caza de la ballena, que ha dejado una impronta muy honda tanto en las villas vascas como en las montañesas. En el Castillo Real de San Vicente de la Barquera encontraremos un cañón de la época de los piratas, que fue recuperado en tiempos recientes de la ría que flanquea el risco en que se asienta la ciudadela.
En este otro post puedes descubrir otros castillo cántabros y un poco de su historia.
La tumba del inquisidor Corro, en San Vicente de la Barquera
Lo que no mucha gente sabe es que aquí se encuentra uno de los ejemplos más bonitos de escultura funeraria del Renacimiento español: la tumba del inquisidor Corro, en San Vicente de la Barquera, refleja a un tiempo el poder y el auge cultural de la Iglesia medieval en nuestro país. Un ejemplo de arte renacentista que nos va a recordar mucho a la tumba del Doncel de Sigüenza, en esa catedral de la provincia de Guadalajara.